viernes, 25 de marzo de 2011

Sao Paulo, la grande...



17 días no bastan para conocer Sao Paulo. La enorme metrópolis merece tiempo, lo exige. Una lugar increíble, que como toda gran urbe, has de encontrar lo feo y también lo hermoso. Un emporio que te obliga a un regreso, porque te engancha. Un Estado que, sin temor a equivocarme, representa el pulso de Brasil. Un Brasil que crece y definitivamente hay que tomarlo en cuenta (no por gusto Obama lo eligió como el primero en su corto periplo por América Latina). Y sobre todo, amén de problemas, que en cualquier lugar existen, se trata de un país en el que se respira la sabrosura del libre albedrío y la prosperidad.

17 días de vacaciones que he disfrutado enormemente, lo mismo en Jaú, Botucatú, Pederneira y otras ciudades del interior. Por supuesto, traigo cosas que contar…


fotos: Fernandina de Jagua/Denis Fortun