miércoles, 29 de febrero de 2012

¿Cómo así…?



Casi todos los días coincido con Rafael y Sandro en el lonche. La media hora de almuerzo con estos dos jóvenes brasileros pasa rápido. Conversamos de innumerables temas que giran alrededor de un bom almoço o um delicioso jantar; de cómo se come la pizza en Rio de Janeiro --asegura Sandro con orgullo, nacido en la ciudad del Cristo Redentor (con ketchup, y además, a gusto de cada cual, lo que representa que unos le derramen por encima unas pocas gotas de esa mermelada gustosa de tomate a la pizza, y otros el frasco entero)--, lo que provoca cierta ira en Rafael (que es de Sao Paulo) al considerar esa manía innecesaria. Para él se trata de un sacrilegio ¡Con lo sabrosas que son las pizzas en Brasil...!

Disfruto entre ellos esa suerte de rivalidad que hallo viven los paulistas con los cariocas. Pique que lo mismo me recuerda a los lugareños de Santa Clara y a los de Cienfuegos; o a los habaneros contra el resto del país, saboreando sobre todo una malsana emulación con los pinareños.

Por supuesto, en esos treinta minutos no hablamos sólo de comida, las maneras en que se guisan, se presentan, y se digieren. Se toca lo mismo la política, y ellos rematan siempre preguntándome en cuanto a Cuba. Confieso que a veces no sé cómo responderles. Simplemente no entienden.

Hoy, por ejemplo, Rafael me sonsacó de nuevo con el tema: una duda auténtica para alguien que no conoce la realidad criolla. – ¿Por qué voces no pueden comer carne de res allá? –

Tomé aire, mastiqué con paciencia en lo que pensaba como hacerle entender a mi buen amigo que, sí se come carne de res, pero se carga con un precio y un riesgo que no alcanzan a acreditar los que no viven esa tragedia. La gestión -- le contesté con sobrado cinismo-- se mueve al amparo de la ilegalidad. Después de tragar, bebí un sorbo de Iced Tea, y finalmente me propuse relatarle una historia que sucedió.

Mira –comencé mi platica con verdadera paciencia, lo que me costó me pasase del tiempo reglamentario para el receso y por consecuencia recibiera una mirada bien cargadita de reproche por parte de mi supervisor--. Allá no se vende carne en las tiendas o bodegas, a no ser de cerdo (al menos en los establecimientos donde se paga con moneda nacional; otro drama que no comprenden con facilidad). Claro, hubo una época, siendo yo niño, siendo bien joven, en que la carne de vaca tocaba a todos por igual. Primero, si mal no recuerdo, era semanalmente; y como les resultó imposible mantener el ritmo de entrega y por ende no cumplir el milagro con regularidad, se empezó a despachar por “novenas”. Pero esos nueve días duraron poco y se “evangelizaron por arte de magia revolucionaria” en quince; más adelante en treinta, y concluyeron en lo que muchos llaman “la sorpresa”: cógela cuando te toca y punto. Un acto que, al yo salir de Cuba, simbolizaba una utopía.

Sin embargo, existen sujetos que se conocen como “matarifes” y que muchos los consideran mártires. Estos “señores” se dedican al sacrificio ilegal de ganado. Cazan una vaca que no esté bien cuidada, la matan, la descuartizan y la venden; los huesos se entierran y el cuero se le ofrece a algún zapatero ilegal.

Ahora bien, pobre de estos “samaritanos con faca” (cuchillo) si los atrapa la policía. Sé de la historia de un abogado que estuvo defendiendo a dos casos bien diferentes, si se valora por separado la gravedad de los delitos: el primero había asesinado a un hombre por una pendencia que se resumía en las ganas de tomar cerveza a granel. La bronca se desencadenó en una fiesta popular que se celebrara bajo la égida de una fecha patria, en una especie de aldea pesquera con apenas unos millares de habitantes. El hombre golpeó con un remo la cabeza de su contrincante y lo despachó de inmediato al Reino de Dios. El segundo, el de la vaca y la faca, lo arrestaron en medio de un campo cualquiera, lleno de sangre, con una cabeza de ganado desmembrada a sus pies.

Pues bien, para que entiendas, el tipo que mató al otro tipo, este abogado consiguió que le diesen la libertad condicional hasta el día del juicio. Y el que sacrificó la vaca jamás le permitieron salir, aplicándose en su persona, con el rigor que según representa la ley sin rasero, lo que se define como una figura delictiva que han de responder “los peligrosos” (que puede ser cualquiera), y que se resume en la prisión preventiva. De la estación de policía lo llevaron directo a la cárcel, y allí estuvo buen tiempo.

--Y pescado, langosta, camarón – insistió Sandro, que estaba muy atento a lo que yo contaba-. Al menos pescado se puede conseguir si vocé tiene en cuenta que seu país es una isla. Es “carne” que alimenta lo mismo, o mejor”.

Meu amigo –le respondí con tristeza--. Conozco a una persona que, pocos días antes de yo salir de Cuba, le encontraron en el refrigerador de su “paladar” unas colas de langostas y dos paquetes de camarones. Al hombre lo prendieron, y por si no bastara, le decomisaron la comida restante, le quitaron también el refrigerador, y tuvo que pagar una multa de unos cuantos miles de pesos…”.

--¿Cómo así?—preguntó Rafael indignado.

domingo, 26 de febrero de 2012

Cuentistas del PEN en Café Demetrios

La narrativa cubana en el exilio cuenta con una antología que sale bajo el sello de Alexandria Library, y ha de presentarse próximamente en Café Demetrio, en la peña La otra esquina de las Palabras, que conduce Joaquín Gálvez. La selección del cuaderno estuvo a cargo de Luis de la Paz. Sobre el libro, José Abreu publica una reseña en el Nuevo Herald. El link para leerla, aquí.

Rolando Jorge y Ernesto G. Todo por irse con Kafka a Miami Beach...

No pretendo reseñar en su totalidad lo que aconteció este viernes 24 de febrero en el estudio de Delio Regueral. Llegué lo bastante retrasado como para perderme la primera parte. Pero --que siempre los hay y a veces no representan necesariamente pesar o reproche-- lo mismo tuve el buen sino de aparecer cuando aún no se había presentado el cuaderno de Rolando Jorge.

Ahora bien, no voy a referirme al libro de Rolando. Resumir lo escrito en este diario poético que se titula Ido a hurgar, será para cuando lo termine; claro, por lo que he visto, desde ya apuesto por sus versos, que bien valen más de una lectura. Dicho esto, entonces me voy a centrar únicamente en la manera tan distintiva en que se hizo el “develamiento”.

Confieso que nunca antes asistí a este tipo de avance, en el que se dicen cosas buenas de libro, de su autor, y con la esperanza de que sean muchos los que finalmente compren. Y que además quien lo firma, lo ha sufrido, no apareciese por ninguna parte a no ser que –y en este punto seré un tanto tétrico, por lo que pido disculpas- ya no esté entre nosotros, que por suerte no es el caso.

Y reconozco que la sorpresa fue agradable, asumiendo al final de cuentas que ya cargaba con una cantidad de dudas en cuanto a lo que se encarna como la presentación de un libro que se acompaña de otros autores que nada tienen que ver con el proyecto. Y es que soy de los que consideran que, un evento así, se reduce a la complicidad que se establece nada más entre el autor, quién o quiénes lo presenten, y el público que asiste. El acto de que asomen otros escritores en el escenario lo hallo como una asombrosa distracción que en nada se justifica, empero que nos encontremos ante el ejercicio de una presentación múltiple.

Sin embargo, aquí corroboro que toda regla lleva consigo la satisfacción que nos brindan las excepciones, y el placer de “violarlas” también vale la pena.

Quizás unos cuantos –descartando lógicamente a los organizadores de la tertulia- ya se imaginaban algo. En cambio, la gran mayoría de los que allí se dieron cita el viernes estaban como yo, “al dorso del madero”. Por lo que, escuchar una nota que justificaba la ausencia de Rolando, según él porque no consiguió resistirse a ir de juerga con Kafka a Miami Beach, y luego se rodara el vídeo en su huida, creó una expectativa –donde los hubo quienes, en un gesto de sana jarana, aseguraron que Rolando está loco— que después se llevó los aplausos, auténticos vale igual subrayar.

Pero bien --que hay más “peros favorables” en esta historia-, lo especial de esta noche a mi modo de ver fue la realización del corto de unos cuatro minutos y segundos. Ernesto G., bebiendo de las referencias del cine silente; o como aseveraron algunos, al amparo de la impronta del cine documental cubano --cuidándose de no establecer un paralelo con el “Noticiero ICAI Latinoamericano”--, supo contar en imágenes lo que presumíamos nos iban a ofrecer en físico, y final todos coincidieron que el producto es de la mejor factura y perdonaron la broma devenida en performance. Y de idéntico modo puedo confirmar, si bien Ernesto con su “Mauiricio Spark" nos mostró una estatura literaria de envergadura, con este vídeo el realizador nos anuncia su mayoría de edad.

Por cierto, ha de inscribirse el histrionismo de Rolando en su currículo artístico. No cabe dudas que “se metió en el personaje” a la manera que exigía Stanislavski…, lo que gozamos de buena gana los que fuimos a Delio’s.


sábado, 25 de febrero de 2012

Entrevista a Javier Iglesias...


Una nube en pantalones...
por Denis Fortun

Javier Iglesias tuvo la amabilidad de concederme una entrevista que agradezco. El cuestionario intenta recoger de alguna manera la historia reciente de un creador polifacético que apenas se acomoda, no sin riesgos, en medio de una ciudad como Miami. Todo luego de un largo periplo que incluye desde La Habana, después Brasilia, hasta establecerse en Hialeah…

Hoy, este emporio al borde de sus raíces, puede sugerir de una buena vez la casa; a no ser que decida otra ruta en busca de una longitud mejor, que debe haberlas. Y es que se trata de una suerte de estigma. Muchos de los nuestros (entiéndase cubanos) cargamos encima la tragedia de esa manera, que se simplifica al ejercicio del continuo escape. Es el esfuerzo representando la indagación, y se traduce en un camino que nos ha de llevar a un sitio cual “El Dorado Criollo”. Incluso si tal utopía ofrece legitimidad para un regreso...

Por supuesto, de volver, aquello que nos hizo escapar, definitivamente ha de formar parte de una triste historia. Un largo capitulo que igual nos toca como un pesado fardo, y que nos marca irremediablemente, pero que ya no ha de existir...

Para leer la entrevista, remítase a Neo Club Press.

jueves, 23 de febrero de 2012

Entrevista a Rodolfo Martínez Sotomayor

Rodolfo Martínez Sotomayor me responde un cuestionario que desde hace mucho hube de poner a su consideración; ya fuese por un motivo u otro, de mi parte siempre fue dilatándose. Sin embargo, un nuevo proyecto en el que participa en conjunto con Ernesto G. y Delio Regueral (Esta noche en Delio's), finalmente se presenta como el mejor de los pretextos, que asimismo no acepta se posponga. Agradezco entonces que Rodolfo me concediese esta entrevista en tan breve tiempo.

Por cierto, confieso también que falta una pregunta concerniente a lo que podría encontrarse quien se dé cita en Esta noche... el próximo día 24de febrero, y que le hiciera por teléfono a Rodolfo: ¿Cómo es que te arriesgas a unir bajo el mismo techo a un narrador (Ernesto G.) y dos poetas (Joaquín y Rolando Jorge), donde uno de ellos además (Rolando) presentará su más reciente libro, lo que hallo, no admite complicidades de ninguna índole?

La contestación fue escueta. –Se trata de una sorpresa y lamentablemente no puedo adelantar ni el más mínimo detalle-.

Nada, que hemos de ir este viernes a Delio Photo Studio... ¡Ah! Déjame decirte, Rodolfo, que Cienfuegos es una ciudad que no admite paralelos por lo hermosa y distinguida. Pero no por eso pretendo ningunear al Cotorro, que hasta tiene una barreada que llaman El Vedado. Detalle que olvidaste mencionar...


Afectos, identidad y literatura. Más que todo, la vida...
por Denis Fortun


Denis Fortun. ¿Quién es Rodolfo Martínez Sotomayor?

Rodolfo Martínez Sotomayor. Un ser humano, con defectos y virtudes. Tratando de tener más de lo segundo que de lo primero, e inmerso en esa constante pelea por alcanzarlo. Apostando por la creación, por la libertad, por la tolerancia. Pidiéndole empatía a la divinidad y tanta capacidad de aceptación como de comprensión. Tratando de no poner nunca mis ambiciones por encima de mi capacidad de sacrificio. Aferrado a una ideología trascendental: La familia y los amigos, siendo a veces más leal que justo. Alguien que disfruta la literatura, el cine, la música, el teatro; pero sobre todo, la vida.

DF. ¿Cómo un joven del Cotorro, poblado que algunos habaneros ubican en medio de la geografía de “Habana Campo”, llega a Miami?

RMS. Vamos Denis, no hay que exagerar, el Cotorro no queda en Cienfuegos, es parte de la Ciudad de La Habana. Eso de “Habana Campo” es un eufemismo más de los cubanos. Una manera de menospreciar todo lo que se sale de su círculo y así creerse parte de algo importante. Además, no olvides que el Cotorro tiene aportes históricos valiosos, una ciudad fundada en 1732 por los Condes Bayona. Con una monumental parroquia de peculiar estilo arquitectónico que data de esos años, llamada, por cierto, pero no despectivamente: La Catedral de los Campos de Cuba, declarada monumento nacional desde 1946. Visitada por ilustres personalidades como Ignacio Agramonte, Morell de Santa Cruz, la Reina Sofía y un largo etcétera. Allí tuvo lugar una gran sublevación de esclavos en el Ingenio de Quiebra Hacha, 200 años antes de La Demajagua. Allí está aún la empresa siderúrgica mayor del país, la antigua fábrica Hatuey, fundada por la Bacardí y ya desde los años 50 poseía textileras, empresas de construcción de piezas para la industria automotriz, fábricas de zapatos y una larga gama de productos industriales. Si vas a la cultura, a varios pasos se encuentra la finca La Vigía, lugar de residencia de Ernest Hemingway hasta el 1961, donde escribió Por quién doblan las campanas, Adiós a las armas y otras más. Según él, un lugar de mucha inspiración.

Vaya, que aunque ya he vivido más años en Miami que en el Cotorro, tengo hasta orgullo de ese origen. Aunque te diré que del Cotorro salimos, felizmente, a través de Jamaica, mi esposa Eva y yo por una reclamación familiar en el año 1989.

DF. Tu pasión por la literatura y el acto de publicar luego, ¿cuándo comienza, cuándo se desencadena finalmente en letra impresa, y cuántos suman hasta hoy tus libros editados?

RMS. Comencé a escribir desde niño, montones de poemas, cuentos, hasta novelas policíacas y de ciencia-ficción. Y lo primero que publiqué --por favor Denis, no te rías--, fue un poema en la revista Pionero a los 10 años. Cuando salí de Cuba iba a publicarse algo en la revista Somos Jóvenes; bueno, como dicen por ahí, “de chiquito no se vale”. Cuando llego a Miami comienzo a publicar y a colaborar en diversas revistas y periódicos. En periodismo hice de todo, reportajes de investigación, entrevistas a personajes de la cultura como Moreno Fraginals, Paquito de Rivera, Delia Fiallo, Fausto Miranda y un largo etcétera. Publiqué criticas de cine, de literatura, de teatro, artículos de opinión en revistas y periódicos como: Carteles, Diario Las Américas, Encuentro, El Nuevo Herald, El Universal y otras. Mi primer libro de relatos fue Contrastes (La torre de papel, 1996), le siguió Claustrofobia y otros encierros (Ediciones Universal, 2005) y Palabras por un joven suicida (Editorial Silueta, 2006) Tengo tres libros inéditos: una novela, uno de cuentos y otro de poesía que saldrán en su momento.


DF. En cuál género literario te sientes más cómodo al momento de la creación.

RMS. Me siento muy cómodo con el cuento y me fascina la novela. Según algunos críticos y amigos, mis cuentos largos parecen novelas cortas. Y lo que más he escrito es poesía.

Ya sé que te sorprenderás, lo que sucede es que a la poesía la respeto mucho, demasiado tal vez y por eso, aunque han aparecido poemas míos en algunas en antologías, nunca he sacado un cuaderno completo. Hay muchos buenos poetas en esta ciudad, y que respeto además.

DF. Como periodista que eres, te pregunto, ¿el periodismo cultural, la crítica ya sea literaria, en las artes escénicas, o en cualquier otra manifestación, piensas que se desenvuelve de manera saludable en el Miami criollo (entiéndase el cubano) con la honestidad, la justeza que merece, o sirve únicamente para desperdigar sobre el papel o la pantalla de un ordenador el resentimiento que le asiste a algunos “críticos y reporteros” y por tanto deja ser interesante?

RMS. No hay nada tan caótico como la libertad de expresión, pero parafraseando a Churchill, hasta el momento no hay nada mejor que contribuya a la felicidad del hombre. Al menos espiritualmente. Emitir un criterio con responsabilidad no es obligatorio en la democracia. La inevitable consecuencia: Por un lado excelentes críticos y por otro, juicios viciados por ignorancia o mala intensión.

Te pongo ejemplos de esas tendencias y es mejor: A veces pareciera ser más importante para el crítico demostrar que sabe mucho, antes que hacer un análisis de una obra. Este tipo de reseña, culmina con dos o tres oraciones sobre la obra, ya sea teatral o literaria luego de una extensa disertación del crítico donde parece olvidar su objetivo inicial.

Otra tendencia es la del prejuicio, no se ve o no se lee la propuesta del artista, sino que se parte de una idea pre-concebida de lo que debe ser, si esta se sale de estos moldes, la tarea es rebajar su nivel. Este tipo de crítico está relacionado con el juicio marxista de la historia u otras aberraciones ya en decadencia.

También existe el crítico por amistad, este tiene dos subdivisiones, una más dañina que la otra, la primera es de quien habla mucho sin decir nada, puedo entender ese pudor por herir al amigo que ha puesto el empeño en una obra y se sentiría decepcionado, triste.
La segunda, sí es peligrosa y hace perder credibilidad a quien la ejerce, se trata de quien utiliza adjetivos inmerecidos, exagerados para una obra artística que no tiene esos atributos y todo el mundo lo sabe. El que sale perdiendo, repito, es el crítico.

Los resentidos son otra cosa, una especie de enfermedad, al no lograr el reconocimiento que se cree merecer o se merece, queda un trauma. Se transforma en malestar constante, en bilis y sarcasmos, en golpes a ciegas a diestra y siniestra. Te repito, es otra cosa, una enfermedad que merece compasión más que atención.

DF. ¿Crees que dentro del espectro de las comunidades hispanas que habitan en Miami, la cubana es la que más aporta a la cultura de la ciudad, o esa suerte de ego incurable que padecemos no nos deja ver lo que otros, lo mismo hacen por el arte y la literatura?

RMS. No creo que sea el ego incurable, si no se tiene autoestima no se puede lograr nada grandioso. Hay que hacer un balance entre virtudes y defectos y encontrar la justa valoración de nosotros como pueblo. Todas las naciones tienen orgullo de sus raíces, una condición indispensable para crecer. Aberración es creer inferiores a otras etnias. Tuvimos el caso del nazismo en un país tan civilizado como Alemania. No creo que lleguemos hasta ahí. Lo nuestro es casi infantil en comparación.

Es obvio que al llevar más de 50 años de exilio, hemos tenido más tiempo y recursos para desarrollar la cultura en Miami, pero el aporte de otras nacionalidades que llegaron después es innegable, ahora mismo tenemos al Teatro Trail dirigido por una Colombiana, Marisol Correa, donde hay puestas con actores de diversas nacionalidades. Tenemos programas de contenido cultural en Radio Caracol, también de Colombia. Acaba de finalizar el festival Latinoamericano del monólogo en Havanafama donde han participado escritores y actores que viven en Miami de origen argentino, dominicano, venezolano, colombiano entre otros. Yo mismo tuve una columna semanal en un periódico de venezolanos. En el TEMFest, dirigido por Sandra y Ernesto García, han participado compañías con actores latinos no cubanos, en fin. La lista es larga.

DF. Un buen día el escritor se convierte en empresario y con la antología homenaje a Juan Francisco Pulido nace Editorial Silueta. Se impone las finanzas a la creación.

RMS. Este libro al que te refieres, con el que inauguramos la editorial, fue financiado en su totalidad por nosotros. Creo que eso te responde algo. La edición se agotó y la ganancia mayor fue que se divulgara el talento de un joven escritor de valor. Por este libro, el nombre de Juan Francisco Pulido se encuentra en el diccionario del Español en los Estados Unidos. Dio pie además a que se conociera a ese tipo de personas que yo llamo “la aristocracia del espíritu”, la familia de Pulido, sus padres Carlos y Elisa, grandes amigos nuestros. También fue un preludio para dar a la luz sus obras completas. Un legado muy valioso.

DF. ¿Existe un patrón que respetes estrictamente al momento de elegir un libro? ¿O en cambio prima el deseo de un autor por saberse édito, y "que suene entonces la caja contadora" y por consecuencia el rigor editorial disminuye? Por decirlo de algún modo, ¿se convierte más tolerante el proceso si la chequera está respaldada por excelentes fondos?

RMS. Denis, qué obsesión tuya con el dinero. Te diré algo, la economía y la libertad están muy relacionadas. Mucho más de lo que se cree en la democracia. La dependencia económica es la antesala de la corrupción. Es por eso que los sistemas totalitarios propician, la peor de todas, la venta del alma. Como dice cínicamente Perugorría en un filme cubano “La libertad está sobrevalorada, la gente prefiere la estabilidad”. Las personas necesitan del Estado para vivir por lo tanto, tienen que servirle. En la democracia, las instituciones y ¿por qué no? los aspirantes presidenciales, reciben grandes fondos que deben devolver con favores, se hace así muy difícil mantener la integridad total. Es una utopía separar capital y poder político. Obama salvó a los bancos y no las casas de la clase media. Su rival prometía hacer lo mismo. Toda esta monserga es para resumirte que la única manera de mantener algo incorruptible es alejarlo de la dependencia económica.

Yo no vivo de la editorial, no respondo a intereses económicos ni políticos, y esto posibilita ser estrictamente selectivo con lo que publico. O sea, tengo libertad para elegir sólo calidad y ese es el mayor propósito de la Editorial Silueta.

DF. Si un escritor quiere publicar con la Editorial Silueta, ¿qué hace?
RMS. En el internet se encuentra nuestra página y correo de contacto.

DF. Quién carga con el peso editorial en cuanto a revisión, correcciones de estilo y otros menesteres literarios, ¿tú o Eva?

RMS. Trabajamos en equipo, otros colaboradores anónimos lo hacen a veces, cuando un proyecto grande lo requiere.

DF. Recién se va a estrenar la peña “Esta noche en Delio’s ¿Qué pretendes tú (a los otros dos implicados le preguntaré en su momento) en cuanto al proyecto? ¿Intentas lograr “En esta noche…” un espacio que fusione con tu editorial; una suerte de sede de Silueta? ¿Una plaza donde además confluirán la fotografía y la realización de vídeos en medio de descargas y lecturas de poemas, cuentos, qué sé yo…?

RMS. Denis, me estás ahorrando el trabajo de pensar, tu pregunta lleva la respuesta, haré un copy and paste para responderte: “una plaza donde además confluirán la fotografía y la realización de vídeos en medio de descargas y lecturas de poemas, cuentos”. Le adiciono además que, es un espacio dispuesto a escuchar propuestas; las proyecciones de vídeos pueden abrir o cerrar las presentaciones, las exposiciones. Todo lo que venga, desde luego, con buen gusto y calidad.

DF. ¿Qué les dirías a los que no se avienen al empeño que compartes con Ernesto G., y el propio Delio Regueral?

RMS. Tienen su derecho. Habría que empezar por explicar cual es el empeño que se comparte. Es en realidad el que hace posible cada proyecto en común. La unidad de propósitos es lo más importante. Delio es un artista plástico, alguien que gusta de la literatura además, con criterios muy independientes. ISawfinger Productions y Editorial Silueta han trabajado en perfecta armonía desde que iniciaron la colaboración. El secreto es la confluencia, Ernesto G. y yo además de la literatura, compartimos la pasión por el cine.

Hemos puesto tanto esfuerzo en la elaboración de los vídeos promocionales como en la presentación. Sin apenas darnos cuenta hicimos un corto de 20 minutos que se proyectó
durante el Festival de Teatro en Miami (TEMFest) en Teatro en Miami Studio. Repetimos la experiencia con Es triste ser gato y ser tuerto, otro corto para el libro del mismo título. Esta es otra fase de la colaboración.

DF. Una última pregunta que gusto de repetir. Cuba, ¿herida que sigue abierta y sangra, o una cicatriz que ya cerró hace mucho?

RMS. Cuba es el país de mi infancia, de mi adolescencia. El lugar que nunca puedo apartar de mí. Tampoco quiero. La identidad está unida a los afectos más profundos, aunque hayamos creado nuestra pequeña patria con todo lo que nos haga felices. Cuba son las habaneras de María Teresa Vera que escuchaba cantar a mi madre, las décimas de mi abuela, mi padre tocando el laúd y cantando El guateque de Portabales mientras yo como mazorcas de maíz azadas en el patio. Cuba son mis primeras lecturas. Arrancarla es negar lo que soy, romper la memoria, la evolución natural. Sólo que ya dejé de sentirla como una herida abierta, ya hace mucho que mi relación con ella es más teológica que patriótica. Creo que más importante que cambiar el sistema social es cambiar al hombre, al cubano, como diría Juan Pablo II, para que todo sea renovado o como diría René Ariza, eliminar el Castro que llevamos dentro. Cuando te decía que mi ideología era la familia y los amigos, confirmaba esa negación del falso patriotismo, no se puede tener caridad con los desconocidos sino se tiene primero con los cercanos, no es creíble. Cuando eso pasa, el servicio a la nación ya no es alentado por motivaciones profundas sino egoístas. Creo que somos parte del dolor de crecer, vivimos nuestra edad media como lo vivió Europa, nuestras guerras mundiales son más de 50 años de dictadura. Al igual que ella, con la madurez que traen consigo los años, llegaremos a la civilidad. Estoy seguro...

Patrick Commecy y las fachadas francesas...




Los franceses, a veces son tan franceses… Quiero decir, se portan de manera que su refinamiento, el arte que facturan al menos en lo que se refiere a manifestaciones como la plástica -que es de lo que intenta reseñar este post-, habría de imitarse sin duda alguna. Y es lo que un amigo mío propone, y que lo que define irónicamente como grafiti galo; que yo diría es una de las mejores soluciones en cuanto decorar nuestro entorno, y a un costo barato si se quiere, sirviéndonos nada más de un hermoso fresco o mural.

Por supuesto, la idea no es nueva. Se remonta más allá del medioevo y en este lado del mundo, en México particularmente, se conoce bien el oficio, por sólo mencionar un ejemplo. Incluso, es una expresión reiterativa y la distingue únicamente el talento de su hacedor y la belleza de su trabajo. Y hasta recuerdo lo mismo que en La Habana de la segunda mitad de los 80 (sobre todo en La Habana Vieja y Centro Habana), y quizás al principio de los 90 (hablo del siglo pasado), se intentaron soluciones parecidas para problemas un tanto, "muy un tantico", similares: se pretendía darle cierto colorete a sitios que se habían derrumbado parcialmente (como muestra la primera secuencia de fotos en su antes y después). Con la lógica diferencia a ojos vistas que ofrece el entramado habanero, en medio de un triste empeño por confrontarlo con la Ciudad Luz. Soluciones en su mayoría de corte apologético en el caso criollo, muy “revolucionarias” para mi gusto…;, y en el mejor de los proyectos, muy faltos de imaginación. Reduciéndose en su mayoría aquellas superficies a marcarse con una suerte de tatuajes repletos de consignas (grafiti revo...) adornadas por bolas y a triángulos raros, de colores fuertes, sobre un fondo blanco preparado ya fuese con cal o cementosa .

Pero retomando la idea…, según prueba el email que recibiese de mi buen amigo El Quilla, el señor Patrick Commecy definitivamente hace arte en las fachadas de los edificios. Bien vale la pena...



lunes, 20 de febrero de 2012

Zona Desconocida marca el post número mil...


Este es el post número 1000 de Fernandina de Jagua. Confieso que pensaba escribir algo en cuanto al tiempo que me exige el blog, la dedicación que representa, sobre lo que he posteado y cuáles han sido los trabajos que he disfrutado más (las entrevistas, por ejemplo); y asimismo, lo que corresponde a ese ingrato acto de bloguear. Un ejercicio, del que he estado a punto de retirarme en innumerables ocasiones, pero que como vicio inevitable me continua atrapando, y que al decir de algunos, es una suerte de grafiti sobre una pantalla, que se distingue únicamente por los signos de puntuación, que en mi caso a veces no los respeto mucho.

Sin embargo, me sorprende en Neo Club Press mi amigo Ángel Velázquez Callejas con una reseña sobre mi libro de décimas, Zona Desconocida, que le agradezco. Se trata de un cuaderno de poemas, al que le guardo un especial afecto, y que fuera mi primer libro publicado en Miami bajo el sello de EdiPart.

Subo entonces, como la milésima vez, el texto de Callejas. Que mejor post, al menos en lo que a mí se refiere, para cerrar el guarismo.




Zonas al margen, Zona desconocida
por Ángel Velázquez Callejas

Sí, quizás Denis Fortún tenga razón o no, pero en lo estrictamente poético hay aún zonas completamente desconocidas. Nadie sabe hasta qué punto el mundo del misterio poético resulta inefable al poeta cuando emprende una búsqueda desde sí mismo, y desde sí mismo se halla inesperadamente frente a la creatividad de la poesía.

Muchos autores han quedados sorprendidos cuando de repente se ven transgrediendo las “estructuras inamovibles” de la tradición poética. Y esto resulta extraño sobre todo en la décima, cuya forma rítmica es ya un canon estructural, quizás de los más viejos en lengua castellana.

He estado leyendo apasionadamente el libro de “décimas” de Denis Fortún, Zona desconocida (Ediciones Itinerantes Paradiso, 2007), no sólo porque me atrae su diversificación temática, el modo inusual con que rompe la estructura canónica en la métrica de los poemas, la juiciosa conjugación octosílaba y el apreciable dominio del contenido universal, sino por la epopeya rítmica que yace oculta en la profundidades sensitivas del autor.

Siempre que alguien se sumerge en las profundidades del ser, tropieza por inercia con algo nuevo. Allí nada se parece a lo que se conoce. De modo que decir que se conoce algo nuevo en ese tropiezo es una falacia, sentir que se abre un espacio desconocido es una verdad. Lo que permanece desconocido, oculto, lo que no puede ser sacado a la superficie pero retumba con ardor en el corazón del poeta, hace de este libro una obra sin precedentes en la literatura de la décima y el octosílabo.

No sé por qué Fortún se decidió por la décima para las sugerencias temáticas, pero ya esto para mí no es lo más importante cuando abro el libro y leo que el autor rima y canta al son del dolor, la angustia y las bienaventuranzas que ofrece la vida. Sea en el campo o en la ciudad, el amor por lo que se ha querido ser, el amor por la autodeterminación, llena de maravilla y fascinación los detalles y entornos corporales, y espirituales, de un ser abrumado por la nostalgia y la melancolía, al mismo tiempo que un espíritu de sobriedad lucha por ganar la vida.

Esta fuerza última hace que el hombre continúe procreando zonas al margen del conocimiento, y creo que este libro da prueba de ello.

http://angelcallejas.wordpress.com/

sábado, 18 de febrero de 2012

La fiesta más esperada...

Hoy sábado es el viernes más largo del año. Al menos así puede asegurarse en Sao Paulo, en Rio do Janeiro; en Bahia; Espíritu Santo; Minas Gerais; Pernambuco; Rio Grande do Sul. Es la sexta-fera más extensa de la que se tenga noticias durante Semana Santa por lo que dura la diversión. Y es que hace unas horas, al momento de redactar este post, comenzó la más grande fiesta que disfrute el mundo: Brasil está en Carnaval.

Si pincha aquí, o acá verá en las páginas de noticias de Globo (G1. Carnaval 2012, y Globo Noticias) todo lo que acontece casi a cada minuto. Ambos portales se actualizan de manera increíblemente rápida, incluso con transmisiones en vivo de los desfiles. Todo un espectáculo extraordinario, del que el año pasado pellizqué algo…

En la foto la presentadora Ana Hickman, una de las más destacada de Vai-Vai, en Sao Paulo capital

viernes, 17 de febrero de 2012

¿Síndrome de La Habana?

No habían pasado más de treinta minutos de la historia del pico y la pala, cuando El Viejo regresó con lo que parecía uno de los tantos artículos que me imprime para que yo los lea cuando me queda algún tiempo libre, casi siempre escaso. Al comenzar a otearlo, descubrí desde las primeras líneas que se trataba de un texto que publicase Carlos Alberto Montaner días atrás (Siete lecciones de Taiwán para Latinoamérica) y de cual ya conocía.

-¿Qué te parece?- me preguntó El Viejo con cara de quien espera una respuesta que lo complazca. Yo le respondí que CAM es un tipo por el que bien vale la pena unos sufragios en Cuba. Yo votaría por él, agregué satisfecho de mi elección.

El Viejo asintió, agregando un tanto filosófico.

--El tipo es inteligente, directo, y sería una buena cura para la enorme herida que representan más de cincuenta años de tragedia. Lástima que un período de gobierno en una democracia sea corto. Lo digo por el tiempo que precisa una gente como él para arreglar aquello.

Sin embargo --prosiguió con un ademán sumamente afectado por la desconfianza--, tampoco doy fe a su entusiasmo –y me señaló el séptimo punto, del que reproduzco un fragmento entre paréntesis (El caso taiwanés confirma el valor de la libertad para convivir y tomar decisiones en todos los ámbitos de la vida personal, la economía o tareas cívicas. No hay contradicción entre la libertad y el desarrollo. Mientras más libre es una sociedad más prosperidad alcanzará…). Acabo de escuchar una conversación allá fuera en lo que venía a traerte el artículo, entre dos comemierdas, dos balseros para mayor desgracia, que están ensalzando a Daniel Ortega y a Hugo Chávez. Dicen que “son unos caballos”. Que uno llegó, y el otro regresa, y se van a perpetuar en el poder como su maestro.

¡Coño! Además de que la noticia es vieja, dolorosa si se quiere, por lo que no le veo gracia al hecho de comentarla ahora, tú crees que con gentes así se puede apostar por una Cuba diferente. Si incluso, estando en el exilio, no dejan de sentir admiración por aquellos que les han jodido la vida a una enorme cantidad de gentes durante tanto, cómo serían allá. Es que, estos cabrones no tienen la más puta idea de lo que significa la libertad, y con tipos así nada puede salir bien. Que va, no hay remedio posible lo menos en tres generaciones. Estamos jodidos…

Viejo –lo interrumpí con la intención de animarlo—que todos no son como esos dos. A lo mejor lo hacen para molestarte. Ellos saben como tú piensas. Claro –concluí--, al final son unos pendejos…

Las armas elementales...

El Viejo y yo terminamos hablando de Cuba por un pico y una pala, que alguien mencionó le hacía falta para no sé qué arreglo en el patio de su casa. Para El Viejo, Cuba es un "tema" que asegura no le importa; demasiado pasó y mucho lo jodieron, para venir a preocuparse siquiera por lo que acontece "allá". Sin embargo, aunque asegure rotundamente que no le interesa, jamás deja de revisar la Internet en busca de noticias, y además, concluye contandome sus sus avatares mientras estuvo en la Isla.

Si puedo asegurar que, como ya es habitual, termino sonriéndome por la manera simpática de relatar la más reciente de sus historias. Y a pesar que me quedo observándolo con cierta compasión por ese sabor un tanto amargo que se le congela en el rostro durante varios segundos, mientras toma una pausa como si intentara recordar algo en específico, disfruto cuando retoma la palabra con su habitual jovialidad. Se trata más bien de un silencioso repaso, que pretende disimular, que en ocasiones delata su disgusto, incluso su dolor, del que todavía no consigue sacudirse de encima sin importar los años que lleva en Miami.

Ayer me contó El Viejo que una vez el Presidente del CDR de su barrio lo llamó para comentarle muy solemnemente que se manejaba al más alto nivel la información de que los americanos esta vez sí iban a invadirnos. Por consecuencia, se pensaba hacer un inventario entre los vecinos para tener el número exacto de cuántos picos y palas podrían reunirse para la construcción de trincheras. El Viejo, riéndose discretamente, le contestó al sujeto que en su casa no existía herramienta alguna que sirviese para eso, y con la misma se dispuso a seguir su camino. Sin embargo, el Presidente lo sujetó por un brazo y agregó disgustado.

--Viejo, la verdad que usted es una persona negativa. No se le puede encomendar una tarea de la Revolución, que siempre se aparece con una excusa para no cumplirla ¿Cómo es que no guarda un pico y una pala, sabiendo que son armas elementales en este momento que vivimos?

El Viejo que se quedó mirando al tipo. Después dio una ojeada a su alrededor, tropezándose únicamente con un asfalto agujereado en tramos; con carros viejos; con mucha gente; con edificios en su mayoría extremadamente cansados por el tiempo que llevan soportando la carga que representa el hacinamiento que padecen, y por fin le dijo.

--Compadre, porque esto es Centro Habana, y yo no tengo siquiera patio en mi apartamento. Aquí tú no ves tierra, ni matas, ni se sospecha que hayan tesoros enterrados o cosa por el estilo, para que uno precise de chirimbolos como esos ¿Está bien...?

miércoles, 15 de febrero de 2012

George Harrinson. Tributo en Miami...

Definitivamente el viernes 24 de febrero se propone como una jornada cultural activa. Recuerdo de nuevo, como ya dije en un post anterior, que el homenaje a George Harrison será esa noche en Casa Panza. Un espectáculo dirigido por Alexander Domínguez, con la participación varios rockeros criollos, y unas cuantas sorpresas…

Para más información, clic aquí.



Esta noche (y aclaro que no es hoy) en Delio's...

Nota de prensa

Editorial Silueta, iSawFinger Productions y Delio Photo Studio anuncian la creación de una nueva peña cultural como una suerte de linaje tripartita. Su nombre es Esta noche en Delio’s, e intenta agrupar bajo el techo, y al amparo del nombre de un buen amigo, las ya acostumbradas descargas y lanzamientos de libros que se vienen realizando con regularidad --y desde hace bastante tiempo-- en dicho estudio fotográfico; también, dicho sea de paso, con nuevos aires…

La peña, a pesar de que enemigos jurados se atrevan a asegurar lo contrario, y hasta aporten “elementos” que corroboren sus alucinantes apreciaciones, no pretende repetirse y menos ser un espacio competitivo con otras tertulias establecidas. En todo caso es una opción más, con un diapasón abierto en cuanto a propuestas artísticas, y con una continuidad marcada más por la dinámica que genere que por una disciplina restringida al dictado de un calendario que ha de obedecerse.

Se trata de un local cerrado, que bien se presta para exposiciones (ya sean de pintura, caricatura, fotografía), con las acostumbradas presentaciones de libros; que sirve igual para recitales de poesía o trova; e incluso me atrevo a sugerir, que también puede verse como una grada para las artes escénicas de pequeño formato y economía de recursos escenográficos (como el monologo, por ejemplo) por el intimismo y la complicidad que se lograría en la sala estudio ubicada detrás. Con la ventaja de un recibidor amplio, renovado recientemente, donde la informalidad cálida entre amigos es conocida por los asiduos.

Según sus organizadores, el opening será el 24 de febrero a las 7:00 pm, con un encuentro de poesía y narrativa. Participarán los escritores Ernesto G., Rodolfo Martínez Sotomayor, Joaquín Gálvez y Rolando Jorge, este último con el lanzamiento de su libro Ido a hurgar (Editorial Silueta, 2011)

De piscolabis y antioxidantes vasodilatadores a base de uvas tintas; y asimismo de cierta bebida alcohólica obtenida de la destilación del fermento de granos de cereal molidos y añejados en barriles de madera, tradicionalmente de roble blanco (y preferiblemente con sello escoses), no se habla en la nota de prensa que me enviara Rodolfo. Sin embargo, hijos de Dionisio o Baco, no se alarmen…

Delio Photo Studio está ubicado en la (misma esquina) 2399 y Coral Way, Coral Gables. Miami.
El vídeo que sigue, de Ernesto G, promociona en 59 segundos y de manera más amena lo que yo digo arriba. Disfrútelo…







domingo, 12 de febrero de 2012

Ojos de Godo rojo, de Manuel Gayol Mecias, el Viernes en Café Demetrio

La tertulia La Otra Esquina de las Palabras invita el viernes 17 de febrero, a las 7:00 p.m., a la presentación de la novela Ojos de Godo rojo (Neo Club Ediciones), del escritor y editor Manuel Gayol Mecías. El libro será presentado por los también escritores Ángel Lago y Ángel Velázquez Callejas.

Será, como ya es habitual, en Café Demetrio (300 Alhambra Circle, Coral Gables). Los interesados pueden llamar al 305-448-4949 para más información.

En Ojos de Godo rojo el joven Joel Merlín desciende a los infiernos de la burocracia socialista, donde reina “Godofredo el Diablo, flor maligna de las encrucijadas”. La Habana, perforada por incontables túneles, amenaza convertirse en la tierra prometida de los turistas extranjeros y los “históricos” del Sempiterno. Se trata de una novela desbordante de imaginación, la crónica deliciosa de una lucha entre dos utopías: la enrojecida hipocresía del totalitarismo godiano y la búsqueda de la perfección ética de un estudiante.

Con la colección de relatos “La noche del Gran Godo” (Neo Club Ediciones, Miami, 2011), Gayol obtuvo en 1992 el Premio de Cuento Luis Felipe Rodríguez de la UNEAC; y en 2004, con “El otro sueño de Sísifo”, el Premio Internacional de Cuento Enrique Labrador Ruiz, del Círculo de Cultura Panamericano de Nueva York. Actualmente el escritor edita la revista Palabra Abierta.



Nota de promoción que tomo de Neo Club Press
Video de Ernesto G (iSawFinger Productions)

LOS NAIPES EN EL ESPEJO, próximamente en Madrid

Los Naipes en el espejo, el más reciente libro del escritor y ensayista Armando de Armas, se presentará el próximo 20 de febrero en Madrid (C/ Orfila, 8, 10 A) a la siete de la noche. El lanzamiento, coordinado por la Fundación Hispano Cubana y a realizarse en la propia sede, contará además con la presencia del poeta y narrador Orlando Fondevila.

Los Naipes…, al decir de Emilio Ichikawa, “es un ensayo paradójico que intenta poner algunas cosas en claro; pero el camino hacia la luz no consiste tanto en ir dejando señales como en ir derribando las que existen. Profana conceptos y creencias con los que ciertamente no nos sentíamos tan incómodos. Este ensayo ha tenido el propósito y la oportunidad de aparecer en el contexto electoral norteamericano de 2012. En ese marco evoca historia y deslinda conceptos que interesan a los principales partidos en contienda. En esta situación, sin embargo, más que por influir sobre la marca en la boleta, De Armas se interesa en problematizar los motivos de la decisión. ¿Es Usted Demócrata cuando vota Demócrata? ¿Es Republicano cuando vota Republicano? La respuesta puede ser afirmativa… pero no necesariamente por lo que Usted pensaba.”

Para adquirir el cuaderno en Amazon, haga clic aquí



La ilustración de portada es de Daphne Rosas

domingo, 5 de febrero de 2012

Camino a seguir, de Yalili Mora

El rostro que muestra cansancio, tristeza o rabia, no vale. No importa siquiera una mirada, un gesto, tal vez un soplo que nos llegue a probar, fuimos felices aquel segundo de vida. El emporio y su paisaje se me antojan como un panorama que no cuenta, donde el color se desvirtúa por obra y gracia de quien lo reproduce. Todo entonces se simplifica de rodillas para abajo, lo que nos hace preguntarnos qué está sucediendo "allá arriba". La verticalidad se impone desde el anonimato. Los que pisan fuerte, por el acto de sobrevivir, proponen la historia que esta vez se pinta por las piernas. Es el camino a seguir (que lo mismo su final se muestra incierto) lo que motiva al artista.

El escenario esta vez se asiste del asfalto; de aceras rotas (cemento viejo, cómplice pisoteado por gastadas suelas, remendadas muchas de ellas). Y bien que sirve de pretexto un reposo momentáneo por una necesaria espera, siendo nosotros parte de una larga fila que presupone ha de soportarse porque se traduce luego como la sagrada subsistencia. O quizás, se trate únicamente de compartir el tiempo en medio de una conversación que se imagina imprescindible, y al segundo después en que termina el parloteo, se olvida. Igual la soledad marca su derrotero y sentimos pena por ese que se apoya de un bastón.

Todo eso, y más, es la inspiración para que la ciudad y su gente trasciendan como arte. Es la vida, sus miserias al amparo de un entorno peculiar y hacinado, lo que se perpetúa en el lienzo.

Yalili Mora supo dibujar la realidad envuelta en el misterio que provoca el acto de no saber quiénes son sus protagonistas. Gentes sin rostro aparente, que habitan inmersos en las cortas distancias que obliga la vida en provincia, en días en los que incluso parece larga la existencia, y en una ciudad que el camino es una suerte de vicio inmensamente arraigado. Es que los puntos casi se tocan en Fernandina de Jagua, y asimismo no se sabe de sus límites, e incluso los redescubrimos. Resulta que lo corto se dispersa al borde del mar, lo que nos da la sensación de que estamos trampeados en un laberinto infinito que dice ser abierto y predecible, lo que es un engaño. Se trata en todo caso de un espacio reducido, en el que no hay mucho a donde ir, y en el cual nuestra extremidades inferiores son la maquinaria de salvamento, por si un día aparece una puerta por la que se configure finalmente la escapada. Mientras tanto la espera, de pie...







Las imágenes de este post son propiedad de la artista.
Yalili Mora Ramírez. Trinidad. Cuba 1972.

sábado, 4 de febrero de 2012

Dilma Rousseff y la matemática de estado


La reciente visita de la presidenta de Brasil a Cuba (por qué, no sé) creó una suerte de expectativa en una parte de la oposición criolla. Los hubo quienes pensaron que la ex-guerrillera se iba a identificar, tan siquiera un poquito, con el tema de los derechos ciudadanos coartados a cada minuto en la Isla. Tal vez, pasó porque en el Brasil de hoy se goza de libertad y de maneras para emprender el desarrollo personal, a pesar de los enormes problemas que todavía se tropieza la sociedad en cuanto a la transparencia en el oficio de sus funcionarios públicos (entiéndase el enredado eufemismo como corrupción a nivel del gobierno federal, de estado, e incluso en municipalidades). Por cierto, donde periódicos como Folha o Estadáo, ambos de Sao Paulo (mencionando únicamente dos de los diarios más importantes en el país), cada vez que se descubre un fraude, o se sospecha, sus titulares marcan luego el derrotero del político que ha de caer en desgracia; casi siempre terminando en la renuncia. Este último trámite, reconozco que se lleva a vías de hecho en el gobierno actual. La administración de Lula, según la opinión de varios amigos brasileños en Miami, en ocasiones se hizo de la vista gorda. Los manejos turbios con recursos del estado, aún cuando no faltaron voces que pedían castigo para los "infractores", quedaron en su mayoría impunes.

Pero, retomando el derrotero que me mueve a este post, la historia de que con Dilma se esperaba que habrían de clarear algunos asuntos sobre las legitimas reivindicaciones de todo un pueblo (y uno que otro permiso de salida), ficaron en medio de una ansiedad utópica después que la señora presidenta (y antes su canciller) dieran por descontado que el tema sobre derechos humanos en suelo criollo no es un asunto medular en las relaciones bilaterales. Un "detalle" que no ha de enturbiar las aguas por donde corre la barcaza de los intereses brasileños en la Isla. Poco importa la suerte de unos cuantos con aspiraciones; aspiraciones que, contrariamente en tierras del susodicho gigante suramericano, se disfrutan.

Más o menos por esta fecha, el año pasado estuve en Brasil (específicamente en Sao Paulo capital y lo mismo en parte del Estado; y una breve vista a Rio de Janeiro que me dejó con ganas de repetir el viaje). Lo que allí sentí, en lo que se refiere al libre albedrío, la prosperidad, y lo poco que importa el gobierno para decisiones a nivel personal, me mostraron un espacio geográfico muy distante de los fundamentos del clasicismo que promueve la izquierda by the book. Y lo más sospechoso, fue que la presidencia de Lula para muchos brasileños se definía como un acto prospero, muy capitalista, por consecuencia al otro extremo de las pautas que marcan el derrotero marxista que, para el mundo (sobre todo en este hemisferio), promovía el ex-mandatario.

Luego entonces, resulta evidente que lo que menos importa a la gobernadora (y al ex-gobernador en su momento) es el panfleto teórico del comunismo, o en su defecto una versión "más tropical"; disparatada diría yo, si se tiene en cuenta lo que aplican como doctrina filosófica y partidaria otros gobernantes dentro del marco irreal que ofrece "el zurdo" contexto hispanoamericano al sur del Río Bravo.

Lo que prima son los intereses de los que están invirtiendo su dinero. Es por eso que, no hemos de extrañarnos por lo sucedido. Nada más, sirviéndome del ejemplo que me ofrece un protagonista (de los varios que se mueven en el suelo patrio), la compañía constructora Odebrecht, la que inexplicablemente no se somete a la ley Helms-Burton y cuenta asimismo con enormes inversiones en Estados Unidos (es la constructora que repara actualmente el Aeropuerto Internacional de Miami; uno de los varios contratos que manejan en patio estadounidense en más de veinte años de trabajo) en Cuba carga en su billetera con una fuerte inversión en el Puerto del Mariel, lo que algunos predicen como una enorme Zona Franca que serviría cual trampolín al instante de que el mercado norteamericano esté expuesto a recibir exportaciones de la mayor de las Antillas; y sin barquitos de papel, parafraseando al que hoy se puede considerar un poeta prohibido por eso de "tengo... lo que nunca voy a conseguir..."

En fin, que la jugada es de aspecto económico. La política y las reivindicaciones no interesan en un periodo que, estoy convencido, los brasileños definen como época de siembra. Nada le empaña el sueño al emprendedor agricultor. No le provoca riesgos que la tierra esté repleta de hierba mala. Ellos consideran que el suelo es fértil, y roturado el terreno como se debe, vendrá la cosecha que se traduce en ganancias. Es por eso que, puntitos en la agenda como la emancipación, la libertad en todas sus variantes y el sufrimiento de millones, no marcan un saldo favorable para el que está jodido; o al menos, reitero, como ya se expresaron a nivel de cancillería, no es preocupante a estas alturas del juego.

Brasil espera pacientemente, con sus dineros en el ruedo, claro está; Cuba continua siendo una llave, aunque ha de quitarse el óxido en su segundo propicio y le falte todavía la cerradura correcta. Cuba es un salto al Norte, cuando el Norte apenas se da por enterado. Cuba es un empeño por el que, desde el Sur y desde Europa, todos luchan a brazo partido sin que las complicidades con la dictadura se les antojen una aberración; al final todo se resume en una estrategia a largo plazo, irónicamente cada día más corto. Brasil sabe lo que hace. Brasil se propone llegar primero que sus competidores, y sin importarle a expensas de cómo lo hace. Es una perspectiva en la que predomina el negocio. Nada personal, se los aseguro.

Por supuesto, la pregunta es la siguiente, en voz de Chico Buarque: Oh, que será, que será..?

jueves, 2 de febrero de 2012

Paulo Coelho a favor de los "piratas"

La noticia ya la han reproducido varios sites en Internet. Por supuesto, se trata de lo que muchos considerarían como un hecho insólito dado que, quien defiende a la "piratería", es alguien que ha sido "pirateado" ni se sabe las veces.

Paulo Coelho se proclama no sólo un defensor, sino que colabora con The Pirate Bay, un portal que no entiende de fronteras en cuanto al copyright y los derechos a la propiedad intelectual o de creación. Incluso, el escritor brasilero promueve la "descarga gratis de sus novelas". Claro, con la esperanza de que alguien después compre una copia física; es decir, un libro, por eso de que nada se compara con un ejemplar. Y hasta firma la nota como El Pirata Coelho.

Por cierto, como asegura el mismísimo Paulo en otro comentario, en sociedades cerradas, dictatoriales, gracias a la "piratería" se consiguieron leer algunas de las mejores obras de grandes escritores, muchos de ellos silenciados por "diferencias políticas irreconciliables", y por promover con su literatura "un mal ejemplo". Otros (entiéndase los nacionales sometidos a una férrea censura, castigados por el atrevimiento de pensar diferente) condenados..., por la misma razón.

Para ampliar lo dicho por Coelho, clic aquí