miércoles, 29 de mayo de 2019

elipsis


Cogen su perro y lo degüellan, lo tiran a un rincón, y no les dice nada. Dejan su pecho hundido a culatazos y no dice nada. Casi lo entierran vivo y no les dice nada
Heberto Padilla /Fuera del Juego


sé de Pedro
con párpados bifocales 
por años amilanan su mirada con antorchas y banderas
pero calla

Pedro
que anida donde la vida se reduce a litigios
enrejados y almadías
marineros y soldadores
pero calla

Pedro
temeroso de la acrobacia
cuando saltar lejos es su mayor codicia
espantado de la elipsis y la charada
padeciendo miedos innumerables  
al escuchar los pasos de las botas que calza el alcahuete que reparte los cerrojos
y por supuesto
calla

Pedro
que pretende estar al tanto del milagro de las puertas suficientes
y en la evasiva acaba sitiado de engañifas
y al arrimo de cadenas
calla

Pedro
dispar y semejante
irremediable y mortecino
con la promesa ajena de ser nuevo
y el dilema de no saber de lo remoto
perdiendo su aliento a cada intento
y ya sin aire
calla

sé de Pedro
y Pedro igual no es tonto
no sólo está al corriente del verbo y su principio  
también sabe de nosotros