por Ginebra
Entre vidrios rotos y papeles en blanco…
sobre siete peldaños comenzó tu muerte…
Escapaste de mis manos sin apenas tocarte,
como de puntillas
sobre teclas de un piano,
escuchando cada nota…
temblando,
padeciendo…
Fragmento de un poema de Ginebra
que tomo de su blog "Los ángeles también lloran"