lunes, 21 de diciembre de 2009

Mi entrevista a Joaquín Gálvez

Cuando conocí a Joaquín, lo primero que hizo fue regalarme un libro, de su autoría quiero decir. Yo lo acepté cortesmente y al llegar a mi casa lo dejé encima de la mesa de noche. Semanas después, aquel cuaderno seguía al lado de mi cama, sin hojearlo siquiera; sin embargo, antes de ubicarlo definitivamente en el librero, me dispuse a leer al menos un poema. Fue una suerte sin dudas y, digo ahora, que lo mismo lamenté no haberlo leído antes. La poesía de este bibliotecario afable y apasionado me atrapó y de un tirón me "bebí" su cuaderno. Gracias a su regalo, hoy me atrevo a asegurar -y no me importa si alguien no lo cree así, yo estoy convencido- que Gálvez es uno de los mejores poetas con que cuenta esta ciudad, y por qué no, la Isla. Esta entrevista, colimada en su mayoría en su nueva labor como promotor, que sirva entonces para agradecer ese gesto que me dio el placer de disfrutar de sus excelentes versos. Por cierto, al momento de publicar estas preguntas, Jota Gálvez se estrena como narrador en su blog
 Vine a este mundo con una misión: la creación literaria
Por Denis Fortun


Denis Fortun. ¿Quién es Joaquín Gálvez?

Joaquín Gálvez. Soy antes que nada un ser humano; algo que se lo agradezco a Dios o la naturaleza, pues si hubiera nacido león, por ejemplo, no me hubiera enterado que soy el rey de la selva. Como ser humano procuro hacerle la vida lo más llevadera posible a mis familiares y amigos. Por otra parte, al igual que otros seres humanos, vine a este mundo con una misión: la creación literaria.

DF. Has incursionado en el ensayo y la crítica ¿Por qué no en la narrativa?

JG. Te diré que acabo de incursionar en la narrativa con un cuento y me dispongo a escribir mi primer libro.

DF. Recién te desdoblas como promotor y estrenaste el espacio “La otra esquina de las Palabras” en Café Demetrio ¿Qué pretendes con esta tertulia y dime si hay espacio para otras manifestaciones artísticas o, si es sólo un reducto para poetas?

JG. Para serte honesto, si he emprendido este proyecto es porque no necesito desdoblarme; lo hago con un inmenso gusto, con la espontaneidad de un aguacero. En realidad, no me considero un promotor, sólo un poeta y amante de la cultura, que se ha dado a la tarea de abrir otro espacio cultural en Miami, para el disfrute de todos. Café Demetrio tuvo que ver muchísimo con esta decisión, pues es un reducto de café europeo asentado en una zona céntrica de una ciudad moderna. Los cafés tradicionalmente han estado relacionados con las tertulias, y esa fue una de las razones que me inspiró a emprender este proyecto. Sólo pretendo contribuir a ampliar el espectro cultural de Miami para que exista diversidad. La Otra Esquina de las Palabras no será solamente un reducto de poetas, pues incluirá otras expresiones artísticas: cine, música, artes plásticas y teatro.

DF. ¿Consideras que en Miami existe el suficiente talento, al menos literario, como para mantener todos los meses una propuesta que invite a la asistencia de un público numeroso en “La otra esquina…”?

JG. Miami está atravesando, en estos momentos, por una etapa de auge cultural. Existe una numerosa cantidad de artistas y escritores talentosos, así como un público que se interesa por la cultura. Creo que sí se puede llevar a cabo mensualmente una propuesta de este tipo. Opino que subestimamos al público miamense en cuanto a su interés por la cultura; sin embargo su asistencia a diferentes eventos artísticos y literarios que se celebran en esta ciudad demuestra lo contrario. Es necesario la persistencia y la creatividad para que no se trunquen estos proyectos.

DF. ¿No temes llevar adelante un proyecto del que ya hay precedentes establecidos?

JG. Gracias a esos precedentes es que puede existir un proyecto como éste, pues los mismos sirven como parámetro para medir el interés del público. No importa cuántos existan: lo importante es que el público tenga una gama de opciones para su propio beneficio. Cada uno aporta algo diferente.

DF. ¿Piensas que vale la pena el esfuerzo si tenemos en cuenta que es el mismo publico casi siempre, y los mismos escritores, los que se mueven de un lado a otro en estas tertulias?

JG. La creatividad es importante para que no se malogre esta tertulia. Es fundamental buscar la forma de hacerla diferente, de encontrar variantes, y de atraer a un público heterogéneo. Como subrayé en una nota de prensa: esta tertulia intentará ser representativa de Miami, por lo que se invitarán a artistas y creadores hispanos de nuestra comunidad.

DF. ¿No crees que puedan verte como un competidor y esto provoque cierto resentimiento en los que promueven sus espacios, o abulia en una parte de ese público que bien puede considerar que es más de lo mismo?

JG. He dicho, desde un principio, que esta tertulia representa un espacio cultural más en esta ciudad, que solo pretende, al igual que los demás espacios ya existentes, aportar su granito de arena a la cultura en Miami. Todos tenemos nuestra importancia; todos aportamos algo, ya sea para un público u otro. La competencia de esta tertulia es consigo misma, con el objetivo de ofrecerles calidad a los amantes de la cultura.

DF. ¿Qué saldos positivos sacas de esta primera entrega de “La otra esquina…” y que te molestó?

JG. Creo que el balance es positivo. Las opiniones así lo demuestran, pero hay que corregir fallas técnicas y organizativas. Somos receptivos a la crítica, pues entendemos que sobre esta base es que un proyecto como éste puede tener un saldo positivo.

DF. Junto a la tertulia, sale tu blog con el mismo nombre ¿Qué podremos encontrar en tu página y, explícame si esta es únicamente para promover las presentaciones y luego reseñarlas, o si se trata de un blog de un formato más abierto y generalizado?

JG. Es un blog cultural, con diferentes secciones de arte y literatura. Además, incluye una sección de periodismo crítico y de temática cubana. El blog tiene el mismo enfoque cultural de la tertulia y le dará cobertura a sus eventos, pero, como la mayoría de todos los blog, tendrá publicaciones diarias en sus diferentes secciones.

DF. Tu opinión sobre la poesía que se hace en Miami

JG. Se hace buena y mala poesía. Pero creo que la balanza se inclina hacia la buena.

DF. ¿Si te decidieras alguna vez a conformar una antología de poesía del exilio, cuáles fueran los primeros cinco nombres de poetas cubanos residentes en Estados Unidos que tratarías de ubicar en el proyecto?

JG. Cinco es muy poco. Serían más y mencionar nombres es correr el riesgo de caer en exclusiones imperdonables.

DF. ¿Qué es lo azul para Joaquín Gálvez?

JG. Un símbolo de libertad, el cual está estrechamente vinculado con nuestra condición insular, en la que el mar es nuestra selva y esperanza, a decir de Reinaldo Arenas, y también el espejo donde nuestro ser se mira, a decir de Baudelaire.

DF. ¿Un libro nuevo por salir?

JG. Sí, tengo un poemario en preparación y, como te dije anteriormente, me dispongo a escribir mi primer libro de cuentos.

DF. Por último, ¿estaría Joaquín Gálvez dispuesto a posar desnudo para una foto?

JG. Sí, cómo que no; casualmente, en estos momentos tengo que interrumpir la entrevista para posar desnudo. Ya me llama la fotógrafa: es mi esposa que desea tener una foto mía en la que aparezca desnudo, para llevarla siempre en su cartera.