El hombre inquieto que resulta inquietante
por Denis Fortun
DF. Quien es Ernesto, dime de la G, y cómo llegas a Miami.
EG. Ernesto es un tipo inquieto, lo que resulta a veces inquietante. La G. es por González. Lo hice al principio con la intención de proteger mi privacidad. Después, cuando caí en la cuenta de que en este mundo de hoy no hay manera de proteger nada, la mantuve porque algunos amigos me dijeron que les gustaba, y yo la verdad respeto mucho la opinión de los demás. También hay otro escritor que se llama igual que yo y escribe cosas muy buenas en TuMiami. No quería que se sintiera ofendido si lo confundían conmigo. Llego a Miami en el año 95. Sin un quilo en el bolsillo, pesando 110 libras y con mi esposa que tenía siete meses de embarazo. Llego a través de una visa familiar, de esas que se otorgaron después de la crisis de los balseros del 94. Llego a trabajar duro, sin tiempo para la literatura. Trabajaba casi ochenta horas a la semana, en una escuela privada y en una pizzería. Después de un año de trabajar haciendo pizzas pude finalmente llegar a pesar 112 libras. Toda una hazaña.
DF. En tu caso, es obligado ir directo: primero a la poesía, luego a la imagen, y en ese orden te pregunto ¿Para ti el verso, como asumen una buena cantidad de poetas, está por encima de otras formas de la escritura?
EG. No es mi caso. No creo que la poesía sea una forma superior de escritura. Es simplemente con la que decimos lo que no podemos decir a través de las otras.
DF. ¿Y la imagen, una manera distinta de versificar, narrar a lo mejor; complemento para una expresión que aún no te alcanza en su totalidad para decir lo que pretendes…?
EG. La imagen es otro modo de expresión. Una continuación de lo que hago en otros campos. Me divierto mucho haciendo videos. Los que me conocen saben que soy un “techie”. La tecnología es otra de mis pasiones. Filmar y editar videos me permite integrar dos cosas que disfruto mucho: la imagen y la tecnología. Si lees mis poemas, verás que la mayoría son bastante visuales. Lo visual para mí es muy importante.
DF. Por qué iSawFinger Productions
EG. Un juego de palabras y sonidos. iSaw=vi, Finger=dedo. Dedo pronunciado al estilo habanero: deo.Vi-deo Productions.
DF.¿Por qué -o al menos que yo me equivoque por desconocimiento y esté preguntando lo que no es- no tienes un cuaderno de poesía publicado, con tantos poemas que escribes?
EG. El libro viene…dentro de diez años.
DF. Sé que lo mismo lo haces en inglés, y que la presencia de los grandes en esa lengua te rondan a cada momento ¿Prefieres el anglo al castellano? ¿Cuál de los dos idiomas consideras más rico al instante de la creación?
EG. Eso generalmente depende del vino que beba. Si es español o chileno, en español. Si es de California, en inglés. En inglés he escrito letras de canciones para un amigo, Frank Sánchez, que tiene un grupo llamado South Vein. Están haciendo cosas muy buenas. Frank y yo estamos trabajando ahora en un disco en español. Todas las letras son mías. En realidad, son poemas que he publicado en el blog y a los que hemos modificado un poco para que encajen con la música. Aunque a decir verdad, Frank por lo general deja que el poema sea el que dicte que tipo de música viene mejor. El proyecto está bien avanzado. De hecho, ya hay unas diez canciones terminadas. La verdad es que no sé por qué algunos poemas salen en inglés y otros en español.
DF. Recién Cuba Inglesa publicó los resultados de una encuesta informal sobre quién es el mejor poeta bloguero, en la que tú sales ganador. Un estudio que, los habrá, dirán que está muy lejos del rigor que representa un acto de esa naturaleza, pero que de alguna manera refleja la opinión de algunos que bien pueden interpretarse como tus admiradores. Coméntame al respecto y, de paso dime, sin desmerecer tu “premio”, a quienes consideras tú como los mejores…
EG. Hay tres poetas cubanos en la blogosfera a los que respeto y admiro mucho: Manuel Sosa, David Lago González y Carlos Pintado. Para mí, ellos son los mejores.
DF. Hablando de blogs, dame tu opinión sobre lo que ahora mismo acontece en la blogósfera cubana en el exilio, sin localizarnos únicamente en Miami. Asimismo, arguméntame si crees realmente que un movimiento como este, tan dispar y heterogéneo, a veces un poco anárquico, representa alguna ventaja para la libertad de todo tipo en Cuba; o si sólo nos vamos quedando en el chanchullo, el brete y la maledicencia, terminando en ataques personales los unos contra los otros.
EG. Los blogs tienen cierta influencia, cierta resonancia. Se ha visto. Pero un blog no tumba un gobierno. Y en el caso de Cuba, no creo que la caída de los Castro significaría el final del castrismo. El castrismo es la supresión de las ideas opuestas, el ataque bajo al que piensa distinto, el control de la información. Al ser plataformas de comunicación que promueven el libre flujo de las ideas, los blogs pudieran ayudar a que algunas de estos comportamientos y modos de pensar castristas vayan perdiendo fuerza.
DF. ¿Qué representa la narrativa en general para ti?
EG. Empecé con la narrativa. Lo primero que escribí en la universidad fueron cuentos. La poesía vino un poco después. A la narrativa nunca la he abandonado del todo. Sigo escribiendo.
DF. ¿Quién es Maurice Sparks?
EG. No sé. Eso es lo que queremos saber todos, ¿no?
DF. Cuba: ¿Nostalgia? ¿Tristeza? ¿Sólo un recuerdo distante? ¿Compromiso…?
EG. Cuba es cada vez más cosas.
DF. ¿Vale la pena un regreso?
EG. Me voy con el cliché: el regreso nunca es posible. Nunca regresamos al mismo lugar. Nunca volveremos a ser lo que fuimos. Regresar sería más bien un reinicio.
DF. Dionisio o Baco, quiero saber qué lugar ocupa el vino en la vida de Ernesto, y por qué ya no sugieres como hacías antes, los Cabernets o Merlot de tu preferencia.
EG. Al contrario de lo que las evidencias indican, no bebo tanto. El vino es un placer, como tantos otros. No sugiero vinos porque me aburrí de hacerlo. Me aburro muy rápido de las cosas, incluso de los placeres.
DF. Por último, ¿es cierto que llamarse Ernesto es importante?
EG. No lo es. Eso es un mito.
foto de Ernesto que tomo de Cuba Inglesa