Hace ya casi un año del cierre de la vieja Fernandina de Jagua II. Los motivos de por qué lo hice, ya los he contado en otros sitios. Hoy, en el regreso, quiero agradecer a los innumerables amigos que me llamaron preocupados por la suerte de mi bitácora, y en especial, a aquellos que me ofrecieron las suyas para que yo continuase publicando.
Será este un blog intermitente. No cuento con el tiempo, lamentablemente, para mantenerlo actualizado de manera continúa. Pero ahí va a estar para los que quieran. Un saludo a todos, y gracias mil.