Poetas y poesía cubana de todos los tiempos
En dos galerías de la Calle Ocho se recordó en el mes de julio a poetas y poesía cubana de todos los tiempos con diferentes ángulos temáticos e históricos.
POETAS Y MEMORIAS
En la Galería Cremata se presentó el último libro de Raúl Eduardo Chao, Poetas y memorias de Cuba (Ediciones Universal), que recorre la historia poética desde el momento de la Conquista hasta el año 2000, siguiendo el criterio personal del editor de esta antología. Este libro tiene un valor añadido: una serie de fotografías que reunió el autor para ilustrar el libro, colocadas apropiadamente en el entorno de sus cinco principales capítulos.
Chao es claramente un apasionado de la historia, pero quiere destacar que Cuba es más que un sitio paradisíaco o más que el oscuro gulag actual; es un país con una historia cultural de siglos. Y como la poesía ha sido prevaleciente en Cuba, "una isla rodeada de poetas por todas partes'', se decidió a destacar este aspecto de su cultura. Fray Gregorio de Escobedo, O.F.M., escribió en 1598, 21000 líneas organizadas en 2000 octavas en un poema titulado La Florida. Y así comienza su libro, con más de 150 poetas con sus mejores poemas y sus biografías. No es un ensayo académico, explicó Chao, y no tiene juicios críticos, porque pensó que ya hay varios de este estilo que recoge en su amplia bibliografía.
Lo original aquí es la recreación del ambiente histórico en la introducción de cada capítulo. Habrá quienes discutan el que se hayan dejado fuera a muchos poemas o poetas importantes, sobre todo ya entrado el siglo XX. Pero no habría manera de incluirlos a todos, porque el autor dice en su introducción que "Cuba ostenta desde hace muchos años el récord mundial de producción de estrofas por hora'', considerando los versos per cápita''. Si usted mira los programas de Miami, la mitad de esos poetas actuales se han mudado aquí. Es un libro recomendable para el disfrute personal y como texto didáctico en el hogar.
EL HOMO-EROTISMO EN LA POESIA CUBANA
Por otra parte, en Zu Galería, el poeta y profesor de la Universidad del Estado de Nuevo México Jesús Barquet hizo un recuento de la presencia del homo-erotismo en la poesía cubana desde fines del siglo XIX, y leyó sus más recientes poemas. Heriberto Hernández dijo unas palabras sobre el tema, indicando que este vocablo es más abarcador, más plural, que el de homosexualidad. Pero nunca comprendimos en realidad la diferencia, a menos que se quisiera rechazar algunos tipos de prejuicios e insistir en un aspecto más mental o sentimental. Porque para Barquet, el homo-erotismo no implica necesariamente homosexualidad.
Además de ofrecer la charla, Barquet leyó sus poemas de una separata, El libro de los héroes, y de su último libro Cuerpos del delirio (Editorial Letras Cubanas, 2010), una compilación escrita dentro y fuera de Cuba entre los años 1971 y 2008, e ilustrado por Yovani Medina --quien también expuso allí algunas de sus obras de gran formato.
En su recorrido literario por la poesía cubana homo-erótica, Barquet citó ante nada al archiconocido Senel Paz, por el cuento El bosque, el lobo y el hombre nuevo, base de la cinta Fresa y Chocolate; pero quiso referirse solamente a la poesía, por lo que pasó entonces a recordar al actual poeta Nelson Simón, con su libro A la sombra de los muchachos en flor (2001), indicando que ya en la isla hay toda una literatura sobre el tema.
De principios de siglo escogió a José Manuel Poveda e Hilarión Cabrisas, considerándolos escritores con elementos de decadentismo en su literatura que implican un homo-erotismo o pan-erotismo, es decir querían escoger lo raro, aunque esto no implicaba que el poeta fuera homosexual. De la década de 1930 a la de 1940 escoge a Emilio Ballagas con su Elegía sin nombre como ejemplo, que fue como un himno nacional para entrar en la "cofradía'' del homo-erotismo, acotó Barquet. Señaló además que el aspecto lesbiano, podría ser parte de un erotismo heterosexual en la literatura cubana. Después de 1960 se instauró la homofobia en Cuba. Pero hubo textos del poeta José Mario, uno de los creadores del grupo El Puente, que fueron altamente homo-eróticos (por eso dejó la isla enseguida y se radicó en España.) Barquet dijo que todos los de este grupo literario eran practicantes homosexuales muy visibles en La Rampa, una sección de El Vedado, en La Habana. Del grupo El Puente, Isel Rivero publicó fuera de Cuba después de su exilio un libro homo-erótico, El banquete.
Más allá de la isla el grupo de El Mariel tuvo que carenar en estas orillas con sus textos pospuestos, como Reinaldo Arenas y muchos otros. En la isla, Antón Arrufat ha seguido componiendo en los 90 textos de esta naturaleza. "Del grupo de Orígenes hay que hacer muchas inferencias'', comentó Barquet, pero hay indicios en vocablos de Lezama Lima, como las "algas'', la "serpiente'', etc., y el capítulo VIII de Paradiso. En los poemas de El libro de los héroes de Barquet, él recalcó que el ejército es un espacio homo-social, a la vez que leyó estos poemas que son una especie de crítica al concepto del héroe.
olconnor@bellsouth.net
En dos galerías de la Calle Ocho se recordó en el mes de julio a poetas y poesía cubana de todos los tiempos con diferentes ángulos temáticos e históricos.
POETAS Y MEMORIAS
En la Galería Cremata se presentó el último libro de Raúl Eduardo Chao, Poetas y memorias de Cuba (Ediciones Universal), que recorre la historia poética desde el momento de la Conquista hasta el año 2000, siguiendo el criterio personal del editor de esta antología. Este libro tiene un valor añadido: una serie de fotografías que reunió el autor para ilustrar el libro, colocadas apropiadamente en el entorno de sus cinco principales capítulos.
Chao es claramente un apasionado de la historia, pero quiere destacar que Cuba es más que un sitio paradisíaco o más que el oscuro gulag actual; es un país con una historia cultural de siglos. Y como la poesía ha sido prevaleciente en Cuba, "una isla rodeada de poetas por todas partes'', se decidió a destacar este aspecto de su cultura. Fray Gregorio de Escobedo, O.F.M., escribió en 1598, 21000 líneas organizadas en 2000 octavas en un poema titulado La Florida. Y así comienza su libro, con más de 150 poetas con sus mejores poemas y sus biografías. No es un ensayo académico, explicó Chao, y no tiene juicios críticos, porque pensó que ya hay varios de este estilo que recoge en su amplia bibliografía.
Lo original aquí es la recreación del ambiente histórico en la introducción de cada capítulo. Habrá quienes discutan el que se hayan dejado fuera a muchos poemas o poetas importantes, sobre todo ya entrado el siglo XX. Pero no habría manera de incluirlos a todos, porque el autor dice en su introducción que "Cuba ostenta desde hace muchos años el récord mundial de producción de estrofas por hora'', considerando los versos per cápita''. Si usted mira los programas de Miami, la mitad de esos poetas actuales se han mudado aquí. Es un libro recomendable para el disfrute personal y como texto didáctico en el hogar.
EL HOMO-EROTISMO EN LA POESIA CUBANA
Por otra parte, en Zu Galería, el poeta y profesor de la Universidad del Estado de Nuevo México Jesús Barquet hizo un recuento de la presencia del homo-erotismo en la poesía cubana desde fines del siglo XIX, y leyó sus más recientes poemas. Heriberto Hernández dijo unas palabras sobre el tema, indicando que este vocablo es más abarcador, más plural, que el de homosexualidad. Pero nunca comprendimos en realidad la diferencia, a menos que se quisiera rechazar algunos tipos de prejuicios e insistir en un aspecto más mental o sentimental. Porque para Barquet, el homo-erotismo no implica necesariamente homosexualidad.
Además de ofrecer la charla, Barquet leyó sus poemas de una separata, El libro de los héroes, y de su último libro Cuerpos del delirio (Editorial Letras Cubanas, 2010), una compilación escrita dentro y fuera de Cuba entre los años 1971 y 2008, e ilustrado por Yovani Medina --quien también expuso allí algunas de sus obras de gran formato.
En su recorrido literario por la poesía cubana homo-erótica, Barquet citó ante nada al archiconocido Senel Paz, por el cuento El bosque, el lobo y el hombre nuevo, base de la cinta Fresa y Chocolate; pero quiso referirse solamente a la poesía, por lo que pasó entonces a recordar al actual poeta Nelson Simón, con su libro A la sombra de los muchachos en flor (2001), indicando que ya en la isla hay toda una literatura sobre el tema.
De principios de siglo escogió a José Manuel Poveda e Hilarión Cabrisas, considerándolos escritores con elementos de decadentismo en su literatura que implican un homo-erotismo o pan-erotismo, es decir querían escoger lo raro, aunque esto no implicaba que el poeta fuera homosexual. De la década de 1930 a la de 1940 escoge a Emilio Ballagas con su Elegía sin nombre como ejemplo, que fue como un himno nacional para entrar en la "cofradía'' del homo-erotismo, acotó Barquet. Señaló además que el aspecto lesbiano, podría ser parte de un erotismo heterosexual en la literatura cubana. Después de 1960 se instauró la homofobia en Cuba. Pero hubo textos del poeta José Mario, uno de los creadores del grupo El Puente, que fueron altamente homo-eróticos (por eso dejó la isla enseguida y se radicó en España.) Barquet dijo que todos los de este grupo literario eran practicantes homosexuales muy visibles en La Rampa, una sección de El Vedado, en La Habana. Del grupo El Puente, Isel Rivero publicó fuera de Cuba después de su exilio un libro homo-erótico, El banquete.
Más allá de la isla el grupo de El Mariel tuvo que carenar en estas orillas con sus textos pospuestos, como Reinaldo Arenas y muchos otros. En la isla, Antón Arrufat ha seguido componiendo en los 90 textos de esta naturaleza. "Del grupo de Orígenes hay que hacer muchas inferencias'', comentó Barquet, pero hay indicios en vocablos de Lezama Lima, como las "algas'', la "serpiente'', etc., y el capítulo VIII de Paradiso. En los poemas de El libro de los héroes de Barquet, él recalcó que el ejército es un espacio homo-social, a la vez que leyó estos poemas que son una especie de crítica al concepto del héroe.
olconnor@bellsouth.net
tomado de el Nuevo Herald