lunes, 2 de noviembre de 2009

En la clausura, la vida sigue igual


Sigo la noticia en Azurina. Se clausura el encuentro de la presidencia nacional de la UNEAC, efectuada en Cienfuegos entre el 27 y el 29. Su presidente, Miguel Barnet, reconoció el quehacer del Comité Provincial y la labor personal de su guía, el historiador Orlando García Martínez.

Dice Miguel, que La Perla constituye un ejemplo de la comunicación y extensión de vasos comunicantes entre la sede nacional y las provincias -¿la física en el arte?-, en una etapa donde los mecanismos de la Unión se revitalizan y repiensan a nivel de país.

Entre lo discutido, según palabras del periodista que redacta la crónica, hay un hecho que al parecer preocupa a la intelectualidad criolla, y en voz de la la Comisión de Racialidad, deberá jugar un papel de significación la lucha contra expresiones de xenofobia interna en la nación


Aclara el periodista, que esta nueva batalla, se refiere a calificativos denigrantes dados, por ejemplo, a los inmigrantes de otras provincias en la capital: los famosos “palestinos”, y en otro caso, el “pinareño”, alusivo a una presunta ingenuidad ciudadana. Y que este fenómeno social, aunque a alguien pueda parecerle nimio, tiene sus peligros obvios. Sin embargo, se olvida la Comisión, igual que el periodista -lapsus mentis colectivo- que lo que es realmente triste, no es la definición de "palestinos", sino el trato que el propio gobierno les da a los que no son habaneros, considerados ilegales dentro del país una vez que salen del Oriente "redentor y heróico"; lo de los pinareños, la "concretera en el cine" es un clásico de "leyenda urbana" que habla por si sólo,

Por supuesto, las bitácoras independintes en la Isla no se quedaron fuera de las reflexiones y se impugnó la labor de desacreditación a la obra de creadores expresada en blogs, de gente con suficiente tiempo como para perderlo en ello y no en hacer.

Lo demás, más de lo mismo. Se Ponderó la institución de premios internacionales como el Tomás Gutiérrez Alea, concedido al actor Benicio del Toro; el Miguel Matamoros, con el cual fue recompensado el cantante Danny Rivera; o el lauro Raquel Revuelta, entregado a Ninón Sevilla, en México. Validó el rescate de la canción en Cienfuegos y reclamó mayor espacio para la obra musical cubana en los medios, batalla todavía no ganada.

Sin dudas, fue una faena interesante el cónclave de los intelectuales sureños, con la realeza y nata de la Unión...