Armando de Armas va a estar este Viernes en Café Demetrio, en la tertulia de Jota Gálvez, y luego de ser presentado por Álvaro Alba comentará en su encuentro con el público tertuliano sobre lo que han decido en nombrar “La identidad del individuo frente a las fuerzas del espíritu colectivista…”.
Visto así, la cosa suena demasiado seria para un fin de semana, quizás hasta aburrida. Sin embargo, todo lo contrario. Ese individuo del que hablará De Armas, y esa fuerza que lo aplasta, puedes haber sido tú, yo, o cualquiera de los que allí vayan; y las estrategias para reducirte, aunque en esencias muy similares, en cada caso guardan una peculiaridad horrorosa que las distuingue. No porque de alguna manera u otra hayamos padecido en menor o mayor cuantía el peso de esa fuerza monocromática -y esa fuerza nunca estará contigo, sino contra ti- , y que desprecia a la diversidad en cualquiera de sus formas, mucho más cuando ésta discrepa de sus “postulados”, no va por eso a encontrarse uno con más de lo mismo.
Cada historia nuestra, en referencia al hecho, es peculiar, merece escucharse, y asimismo ser denunciada constantemente. Y de alguna manera somos nosotros, los que estamos lejos, los que hemos preservado nuestra identidad aunque pagamos por ello el precio del desarraigo al habitar en una suerte de limbo en cuanto a país y raíces se refiere; las que nos trajimos dentro y no en una maleta.
Pero además, si queda algún escéptico, quien mejor que Armando, alguien al que conozco hace muchos años, para que hable del tema. Sé de primera mano de sus innumerables veces “fajao” para que su identidad no fuese anulada. Sé lo mismo que nunca se plegó a esa fuerza. Vale entonces escuchar lo que ha de decir, por lo que recomiendo, visiten Café Demetrio este Viernes…; tómense también unos vinos..., y pregunten, que mi ecobio tiene mucho que contar.
Visto así, la cosa suena demasiado seria para un fin de semana, quizás hasta aburrida. Sin embargo, todo lo contrario. Ese individuo del que hablará De Armas, y esa fuerza que lo aplasta, puedes haber sido tú, yo, o cualquiera de los que allí vayan; y las estrategias para reducirte, aunque en esencias muy similares, en cada caso guardan una peculiaridad horrorosa que las distuingue. No porque de alguna manera u otra hayamos padecido en menor o mayor cuantía el peso de esa fuerza monocromática -y esa fuerza nunca estará contigo, sino contra ti- , y que desprecia a la diversidad en cualquiera de sus formas, mucho más cuando ésta discrepa de sus “postulados”, no va por eso a encontrarse uno con más de lo mismo.
Cada historia nuestra, en referencia al hecho, es peculiar, merece escucharse, y asimismo ser denunciada constantemente. Y de alguna manera somos nosotros, los que estamos lejos, los que hemos preservado nuestra identidad aunque pagamos por ello el precio del desarraigo al habitar en una suerte de limbo en cuanto a país y raíces se refiere; las que nos trajimos dentro y no en una maleta.
Pero además, si queda algún escéptico, quien mejor que Armando, alguien al que conozco hace muchos años, para que hable del tema. Sé de primera mano de sus innumerables veces “fajao” para que su identidad no fuese anulada. Sé lo mismo que nunca se plegó a esa fuerza. Vale entonces escuchar lo que ha de decir, por lo que recomiendo, visiten Café Demetrio este Viernes…; tómense también unos vinos..., y pregunten, que mi ecobio tiene mucho que contar.
7:30 de la noche.
300 Alhambra Circle, Coral Gables
(305)448-4949
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