Una mujer inmersa
en el mundo virtual
por Armando de Armas
13 de octubre del 2011
Idabell Rosales ha publicado en diversos medios impresos y digitales, coordina la revista Blogger Cubano, preside el diario Neo Club Press y desempeña un intenso activismo a favor de las libertades en Cuba. Rosales es promotora, productora, publicista y editora. En La Habana, Cuba, donde nació, trabajó para la televisión en numerosos programas infantiles, y produjo el popular programa Contacto que conducía Hilda Rabilero. Tras su arribo a Chicago, Estados Unidos, en la década de los noventa, se desempeñó como actriz para series infantiles, además de trabajar como bailarina y publicista. Al llegar a Miami Rosales laboró como representante de la compañía de alimentos Goya.
Por otro lado, artículos suyos han aparecido en diversos medios impresos y digitales. También codirige la editorial Neo Club Ediciones. Activista, además, a favor de las libertades individuales en Cuba. Armando de Armas entrevistó a Idabell Rosales para Marti Noticias.
¿Qué ventajas tiene, si es que alguna, el mundo virtual sobre el mundo real?
En el mundo virtual son más las ventajas que las desventajas. Como en todo, depende de ti cómo decides usar las herramientas. Es un mundo que permite desarrollar tu individualidad a cabalidad. Navegar en Internet es darle sentido a lo ilimitado del ser.
¿Cuántas horas de su vida permanece sumergida en el mundo virtual?
Con las nuevas tecnologías vives un mundo virtual prácticamente las 24 horas del día, con los smartphones, los tableros electrónicos, no escapas. Tu mundo virtual es parte de, es tan real como lo que crees “única realidad” o vida real.
¿No teme enloquecer ante la avalancha de la virtualidad?
Demasiado contenido en la Red, pero la locura a veces salva. El temor es uno de los peores sentimientos que puede tener un ser humano. Y temerle a enloquecer con la virtualidad sería temerle al desarrollo, el ser humano no debe seguir dándole abrigo al miedo. No te descubrirás nunca, no sabrás nunca de qué vas. Lo virtual es parte de tu vida y debes ser tan responsable como lo eres cuando das “shut down” a tu ordenador. No temo enloquecer, enloquezco de curiosidad por la virtualidad.
¿Cuál es su función específica dentro de la publicación Neo Club Press?
Un portal online requiere de mucho trabajo, que se traduce desde la búsqueda de un contenido atractivo para el tráfico que vas creando, hasta la publicidad, haciendo social media, ventas, constantemente optimizando. En el caso de NCP (http://neoclubpress.com/) trabajamos para diferentes públicos de habla hispana. Te diría que el mundo online es muy versátil e inquieto. Es un niño libre, curioso, explorando en todas las direcciones, y creo que esa es mi esencia, “mi función específica” no solamente en Neo Club Press, sino en todo lo demás.
¿Qué otro proyecto estás desarrollando, además del portal online?
Bueno, en Neo Club Ediciones editamos libros, los presentamos y publicitamos. Escribimos libros por encargo, firmados o no por nosotros. También damos servicios de publicidad y Redes Sociales, configuración de blogs, clases de navegación en Internet vía Skype, etc. Tenemos diferentes paquetes personalizados.
¿Cree que la lucha por las libertades en Cuba ha ganado en eficacia con el uso de las redes sociales?
A pesar del escaso acceso de la población cubana dentro de Cuba a Internet, se ha ganado un mundo. La tecnología es quien tiene a todos estos dictadores corriendo. Los ciudadanos cada vez exigimos más desde nuestras redes. Lo mismo ves una foto de OLPL denunciando la represión a las Damas de Blanco por Twitter que a Joel García, un cubano en Canarias, rebotando el toque de cazuela de Cuatro Caminos, que al disidente Darsi Ferrer desde su Facebook poniendo en entredicho a Raúl Castro. Te pudiera citar muchos ejemplos. Los dictadores antes podían esconder más fácilmente sus abusos, hoy decimos “in your face”, aquí está la prueba. Gracias a esta maravilla que es la tecnología. Ellos ya no pueden esconder mucho, están rabiosos. Cuando la verdad la tienes delante de tus ojos, es muy difícil voltear la cara.
¿Tiene usted contacto con blogueros dentro de Cuba?
Tenemos contacto, pero sobre todo con la disidencia, que es en este caso la más necesitada de apoyo o cobertura en relación con las nuevas tecnologías.
¿Es usted feminista?
El mundo debería estar guiado por mujeres, o por hombres más sensibles. Le va muy bien a todos los matrimonios en los que las mujeres son las que llevan los pantalones. Son pantalones con más sensibilidad y el mundo necesita que prime ese feeling. Es admirable ver a un caballero afectivo, cariñoso.
Relacionado con esto pronto aparecerá en las redes “El Libro de la Salvación”, una especie de teología cibernética protagonizada, precisamente, por una mujer: Idamanda. Esperamos que la página sirva para desarrollar una perspectiva más ambiciosa, y novedosa, sobre el papel que puede jugar la sensibilidad femenina en el desarrollo de nuestra civilización. El libro también aparecerá el próximo año editado por Neo Club Ediciones.
¿Piensa que la lucha por la igualdad de la mujer podría haber terminado por esclavizarla doblemente: por un lado la tradicional esclavitud de atender casa, hijos, marido y, por la otra, la esclavitud, casi siempre más férrea, del patrón, que cada vez más suele ser el estado, en un trabajo para contribuir al sustento del hogar (cosa que antes solía ser obligación del macho de la especie)?
Estoy un poco harta de todos estos encasillamientos del pasado. Trato de vivir aportando lo mejor de mí. Pienso que todo es posible según tu capacidad. ¿La esclavitud de atender casa, hijo, marido? Siento un placer indescriptible atendiendo y mimando a mis hijos y a mi marido, y es muy gratificante sentir esa reciprocidad. El hombre no va a ser más hombre porque trabajó hasta las ocho de la noche, o el padre abandonando tanto tiempo el hogar, así lo veo. Pienso que precisamente por depositar toda la responsabilidad en el “macho” de la especie el mundo está tan carente de comprensión y de ese aporte femenino tan vital.
¿Qué pervive en Idabell de La Habana?
Mis amigos de la infancia. Pervive la vista al mar, desde mi balcón. El café de la mañana con mi padre.
¿Regresaría un día a vivir a La Habana?
Superé esa etapa en que agonizaba por sentarme en el malecón y oler el salitre. Ya me entrego a otro futuro y desgraciadamente La Habana forma parte de ese triste pasado. Me alejo constantemente del dolor y La Habana y Cuba son de esas cosas que constantemente duelen. Tienes siempre esa sensación de querer salir del “lastre”, pero quedan familia, vivencias, ese pasado que hala de una forma u otra, reflexiva o instintivamente.
Le agradezco por haberme dado la oportunidad de responder sus preguntas.
Texto y foto que tomo de Martí Noticias