Armando de Armas (MN). He leído un excelente post sobre Miami en su blog Chiquita Mala ¿Cómo se ve, percibe Miami desde Normandía?
Margarita García Alonso. Gracias, Armando. Siempre digo "Los Miamis", desde aquí veo la ciudad como un ente muy vivo, contradictorio, apocalíptico. Sé que tiene lugares preciosos por las series de la TV pues he encontrado muy pocas descripciones, o crónicas de la ciudad de los escritores cubanos que la viven.
Siento - y todo es subjetivo -que es una "ciudad mal amada", como si estuviera poblada de personas que están de paso, otras amargadas por haberse quedado mas tiempo del necesario, otras que han dicho "esta es la vida", aun guardando las maletas prestas en el garaje, otras que andan en quejas y tirándose piedras como si nunca hubiesen salido del barrio cubano, junto a ciertos imperios bien establecidos , periódicos lamentables que desinforman, entrevistadores que responden las preguntas , en contraste con una tropa de personas buenísimas, humanas, que tengo de amigos.
Siempre ando preocupada por sus suertes, a veces, leo textos escritos allá, me convencen que en Miami sería tremenda periodista de controversia.
Me da pena por la ciudad, no es responsable de albergar tantos destinos de desatinos, ese que impone el exilio, y que se expresa en violencia y fuertes marejadas, en los extremos.
Sí puedo decirte lo que llega, y con permiso y perdón a sus ciudadanos, es que es un andén de un puerto repleto de gritos, quejas, añoranzas y conflictos personales no resueltos; donde pululan "espías", desesperanzados, y gente muy linda y buena que si sabe apreciar la libertad y trabaja el doble de lo que permite el cuerpo para lograr sus sueños.
Espero que los miamis sea un día Miami, la ciudad que salvó a tantos, la que invada páginas de añoranza en los que regresen a la isla, y respire, con los que por voluntad decidan ser miamenses. Espero conocerla.
Margarita García Alonso. Gracias, Armando. Siempre digo "Los Miamis", desde aquí veo la ciudad como un ente muy vivo, contradictorio, apocalíptico. Sé que tiene lugares preciosos por las series de la TV pues he encontrado muy pocas descripciones, o crónicas de la ciudad de los escritores cubanos que la viven.
Siento - y todo es subjetivo -que es una "ciudad mal amada", como si estuviera poblada de personas que están de paso, otras amargadas por haberse quedado mas tiempo del necesario, otras que han dicho "esta es la vida", aun guardando las maletas prestas en el garaje, otras que andan en quejas y tirándose piedras como si nunca hubiesen salido del barrio cubano, junto a ciertos imperios bien establecidos , periódicos lamentables que desinforman, entrevistadores que responden las preguntas , en contraste con una tropa de personas buenísimas, humanas, que tengo de amigos.
Siempre ando preocupada por sus suertes, a veces, leo textos escritos allá, me convencen que en Miami sería tremenda periodista de controversia.
Me da pena por la ciudad, no es responsable de albergar tantos destinos de desatinos, ese que impone el exilio, y que se expresa en violencia y fuertes marejadas, en los extremos.
Sí puedo decirte lo que llega, y con permiso y perdón a sus ciudadanos, es que es un andén de un puerto repleto de gritos, quejas, añoranzas y conflictos personales no resueltos; donde pululan "espías", desesperanzados, y gente muy linda y buena que si sabe apreciar la libertad y trabaja el doble de lo que permite el cuerpo para lograr sus sueños.
Espero que los miamis sea un día Miami, la ciudad que salvó a tantos, la que invada páginas de añoranza en los que regresen a la isla, y respire, con los que por voluntad decidan ser miamenses. Espero conocerla.